El Reino Unido debe presentar propuestas escritas para resolver la cuestión de la frontera irlandesa sobre Brexit en el plazo de una semana, según han acordado Leo Varadkar y Donald Tusk.

Revelando detalles de su conversación con el jefe del Consejo Europeo en Nueva York durante la Asamblea General de la ONU, dijo el taoiseach: «Tenemos métodos de trabajo y sé que al Presidente Tusk y a otros jefes de Gobierno de la UE les gustaría ver propuestas británicas por escrito en la primera semana de octubre, de lo contrario es muy difícil ver cómo podemos llegar a un acuerdo en la cumbre de mediados de octubre.

«El acuerdo de retirada es en realidad un tratado internacional. No es el tipo de cosas que pueden ser modificadas o improvisadas a altas horas de la noche en la reunión del Consejo Europeo del 17 de octubre.

«Así que si el Reino Unido tiene propuestas significativas, cambios que les gustaría sugerir al acuerdo de retirada o a la declaración política conjunta en particular, realmente necesitamos verlos de antemano para que puedan ser estudiados y trabajados antes de la cumbre de la UE».

Oficialmente, la UE sigue sosteniendo que el acuerdo de retirada no puede reabrirse, pero los comentarios de Varadkar, junto con otras observaciones realizadas en los últimos días, indican un debilitamiento de esta línea dura.

Hace dos semanas, el comisario de la UE de Irlanda, Phil Hogan, dijo que si se necesitaban mejoras en el acuerdo de retirada que pudieran sellar un acuerdo, éstas serían consideradas.

«Hay cuestiones constitucionales que ya están en el acuerdo de retiro que podrían tener que ser mejoradas si se hace esta solicitud. Por supuesto que podemos mirarlo.

Las conversaciones entre funcionarios británicos y la Comisión continuaron el miércoles en Bruselas, pero los diplomáticos de la UE consideraron significativo que el negociador principal de Boris Johnson, David Frost, no estuviera presente.

«Supongo que seguirán apareciendo y nosotros seguiremos participando, pero incluso es difícil tratar de averiguar de qué quiere hablar el Reino Unido en estas conversaciones; incluso eso necesita una aprobación política y parece difícil de conseguir», dijo una fuente de la UE.

«La gente ha estado diciendo durante años que tal vez tengamos que esperar hasta después de la conferencia del Partido Conservador para recibir nuevas propuestas, pero, realmente, ¿hará una diferencia?

El espacio entre los dos lados es muy grande. Y sólo faltan unas semanas para la cumbre. Parece seguro que el Reino Unido buscará una extensión, y no hay mayoría para un acuerdo en el parlamento».

Otra fuente dijo que había cierta expectativa de que Johnson ideara un plan para la fronteraque implicara poco más que una inserción «quirúrgica» en el acuerdo de retirada, pero que eso no había ocurrido.

La atención se ha centrado en una posible cerradura Stormont, lo que permite a la asamblea delegada opinar sobre cualquier alineación reglamentaria entre Irlanda del Norte e Irlanda. Sin embargo, fuentes dijeron que es poco probable que esto sea suficiente para cerrar un trato.